¿Apuestas físicas o apuestas online? Escrito por Carlos López 1 Actualizado el 22/06/2018 Hace unos días estuve pensando acerca del auge que están teniendo las apuestas online, donde todos hemos visto cómo están proliferando y creciendo a pasos agigantados. Cada vez son más las casas de apuestas y también más las alternativas de juego, pero… ¿y las apuestas físicas? Aunque la tendencia actual es apostar desde la comodidad de nuestro hogar o cualquier otro lugar gracias a nuestros dispositivos móviles, hay muchas casas de apuestas que nos brindan la oportunidad de tentar a nuestra suerte de manera física, algo a lo que seguramente muchos de nosotros no estamos acostumbrados. Diferencias entre apuestas online y físicas Cuando estamos en Internet podemos elegir las cuotas más adecuadas en cada momento y darnos de alta en cualquiera de las casas de apuestas que más nos guste. En cambio, cuando estamos en un local de apuestas, las cuotas son las que hay, no podemos elegirlas, solo las que nos ofrece el propio establecimiento en ese momento. La información es poder e Internet es de gran ayuda para los que solemos apostar desde casa, porque tenemos información al instante, estadísticas, tendencias y muchos otros datos de fácil consulta, algo que en un local de apuestas no tenemos a no ser que llevemos nuestro dispositivo móvil. Personalmente, creo que tener acceso a estos datos es de vital importancia dado que podremos reaccionar de manera más rápida y bastante más acertada en la toma de decisiones cuando llegue el momento. Para finalizar quiero destacar que a la hora de apostar es importante poder tener un ambiente relajado, al menos lo hablo desde mi opinión. Puede que haya personas que apuestan con total tranquilidad en un entorno ruidoso pero yo personalmente soy incapaz. En casa o en un entorno relajado siempre se puede apostar de una manera más tranquila, controlando las cuotas y toda esa información que antes os comentaba, pero hay una cosa que supera a las apuestas desde casa, es el ambiente que se puede llegar a respirar en un local de apuestas, cercano, amigable e incluso con bastante emoción.